martes, 25 de agosto de 2009

Thingvellir. Un poco de Historia





En este lugar se aúnan como en pocos un entorno natural espectacular y un espacio histórico de primera magnitud, ejemplificando lo esencial de Islandia, donde la Naturaleza es tal vez el principal actor de la Historia.

Hablando de Historia, introduzcamos brevemente la de Islandia. Este país no fue poblado por los seres humanos hasta el siglo IX de nuestra era. No hay por tanto Edad de Piedra, del Bronce, túmulos, menhires y ese tipo de cosas… Tampoco hay ni hubo una población local de origen previo a la colonización continental, que llamaríamos aborigen, como los indígenas americanos, los inuit de Groenlandia o los lapones.

En el siglo IX llegan a la isla algunos monjes irlandeses deseosos de retirarse a lugares apartados y vivir como eremitas. Su presencia es testimonial y no desarrollan grandes construcciones ni su número llega a ser muy grande.
En el siglo X se produce el acontecimiento realmente fundacional del país, con la llegada de exilados noruegos, que huyendo de la subyugante monarquía nórdica, encuentran en este desierto lugar una tierra primero de exilio, después de refugio y finalmente de enraizamiento.

En el primer siglo llegan los cuatrocientos colonos originales. Sus peripecias y también muchas otras historias reales o míticas se encuentran escritas en las Sagas, detallados relatos de alta calidad literaria, escritas en el siglo XI, y por ello pocas generaciones después de la llegada de los primeros colonos. Hoy cualquier islandés puede rastrear fácilmente su árbol genealógico hasta uno de esos primeros cuatrocientos colonos.

Tras doscientos años de Edad de Oro, Noruega invade la isla, y un siglo más tarde Dinamarca ocupa su lugar. No es hasta 1944 que Islandia consigue la independencia completa, tras varias décadas de autonomía creciente y a tenor de los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial, cuando tras la invasión alemana de Dinamarca, Islandia es ocupada militarmente por los Estados Unidos de forma preventiva.

Pero volviendo al lugar que nos ocupa, aquí se reunía el Parlamento desde la llegada de los primeros colonos vikingos. Puesto que huían del poder absoluto del rey noruego, nunca adoptaron la monarquía como forma de gobierno, tratando de tomar decisiones acordadas en esta asamblea. Se trata por tanto del parlamento aún en funcionamiento más antiguo del mundo, ya que aunque bajo dominio extranjero, se ha mantenido de forma ininterrumpida.

La reunión era anual. Era el momento en que todos los jefes de clanes acudían desde los cuatro puntos cardinales. Era la época del comercio y el intercambio de información. Se declaraba una tregua obligatoria para cualquier tipo de confrontación en marcha.

Desde la roca de la ley, un elegido leía un tercio del cuerpo legislativo vigente, y todo lo referente al funcionamiento del parlamento.

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